
¿Qué te inspira a crear?
“Mi inspiración es la vida en sus más variadas dimensiones. Abordo preocupaciones humanas fundamentales y sus conflictos, teniendo como tema principal el comportamiento humano”.
¿Cuál es el motor de tu creatividad?
“Mis referentes son mi propia trayectoria, no hay forma de excluir todo lo que he vivido, experimentado, construido y aspiro, de lo que hago en el arte. El hecho de tener una formación profesional diversa, Odontología (PUC-MG), Bellas Artes (UFMG) y Educación para Superdotados
y Talentosos (UFLA), me permitió observar las debilidades, incertidumbres, virtudes, miedos, conflictos, diferencias y similitudes humanas, y cómo esto interfiere en la comprensión global de que somos iguales y habitamos el mismo planeta”.
¿Cómo describirías tu estilo y cómo llegaste a él?
“Soy un artista visual contemporáneo, con una fuerte tendencia hacia el abstraccionismo, esencialmente colorista, y mi paleta de colores se crea a medida que se ejecuta la obra. Estas obras cuentan historias, plantean preguntas, cuestionan y despiertan curiosidad. Trabajo de forma diferente con la pintura, el grabado y los objetos, siendo el simbolismo el elemento principal que conecta y engloba mis temáticas. Llegar a este proceso fue un largo camino dedicado al autoconocimiento y a la investigación de técnicas con las que me identifiqué”.
¿Qué buscás que el público sienta o piense cuando se enfrenta a tu obra?
“A través de mi trabajo me gusta invitar al espectador a reflexionar sobre el título de la obra, que es inseparable de ella, y la imagen presentada. El tema siempre será la vida, las relaciones humanas y el fuerte deseo de que dejemos de ser consumidores habituales y nos convirtamos en ciudadanos globales”.